Ojalá

Ojalá supiera qué decir, cuando no hay nada que me salve de esta vida sin ti.

Ojalá tus ojos no me provocaran tormentas y pudiese ver lejos de tu mirada la luz del sol.

Ojalá no luchase constantemente entre polos opuestos:
mis luces y mis sombras, el frenesí de los licores 
y lo amargo del café.

Yo, y la poca dulzura que me queda...mi muro, en ruinas, de mí.

Ningún comentario:

Publicar un comentario